LEYENDA DEL MONTE DO GOZO

DE LOS 30 LORENSES Y DEL DIFUNTO QUE EL APÓSTOL TRANSPORTÓ EN UNA SOLA NOCHE DESDE LOS PUERTOS DE CIZA A SU IGLESIA

Este milagro atribuido a Santiago está  incluido en Codex Calixtinus y dice así:

Treinta hombres importantes de la región de Lorena habían prometido visitar la tumba de Santiago. Esto sucedía en el año 1080. Partieron todos juntos jurándose terminar el camino todos juntos, pero al llegar a la ciudad gascuñana de Portam Clausam cayó gravemente enfermo uno de ellos. Sus compañeros lo llevaron hasta el puerto de Ciza, recorriendo en 15 días lo que normalmente les hubiera costado 5. Una vez llegados allí y viendo que no mejoraba todos decidieron abandonarlo a su suerte menos uno de ellos que se quedó con él.

Sacando fuerzas de flaqueza el peregrino ayudó al enfermo hasta llegar a la cumbre del puerto de Ciza pero al llegar la noche el moribundo murió. Su amigo se quedó allí solo y sin posibilidad de enterrarlo y entonces le pidió ayuda a Santiago.

Al poco tiempo vio acercarse a un jinete montado en un soberbio caballo blanco qu e se detuvo junto a él y le preguntó qué hacía allí solo en la noche. El peregrino contestó que no podía enterrar a su amigo y le contó todo lo que había pasado.

El jinete subió al muerto y al peregrino en su caballo y a la mañana siguiente milagrosamente se encontraban en el Monte del Gozo; allí Santiago le pidió que enterrara al muerto y que una vez cumplidos los funerales se quedase una noche orando ante su imagen en la Catedral y luego que regresase a casa. Cuando en el camino de regreso se encontrase con sus compañeros que irían aún de camino hacia Santiago, les debía anunciar que debido a su deslealtad para con su compañero enfermo, sus oraciones no le iban a satisfacer y que pensaba imponerles una dura penitencia.